Piparras en vinagre

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Las guindillas de Ibarra, o piparras, es el nombre por el que popularmente se conoce a uno de los productos más típicos del País Vasco y de Navarra.

La auténtica guindilla de Ibarra, la que se produce y envasa en la provincia de Guipúzcoa, es de piel fina, de color verde amarillento y de carne tierna y fresca que no pica.

Se puede comer frita, y sazonada con una pizca de sal, y servir como aperitivo, o bien se puede conservar en vinagre con un poco de sal, que es su presentación más habitual. Es este segundo modo de presentación como más popularmente se la conoce, convirtiéndose en el acompañante perfecto de un plato de legumbres. Tan solo tienes que servirlas en un plato, aderezarlas con un chorrito de aceite de oliva virgen extra y sazonarlas con una pizquita de sal y más que listo. Por cada cucharada de legumbre que va a tu boca, va el mordisco de una guindilla acompañándolo.

En el País Vasco, una de las tapas más típicas y distintivas es la "gilda", que consiste en un pintxo en el que se ensartan una guindilla y una anchoa del Cantábrico entre dos aceitunas verdes rellenas y se adereza con aceite, si puede ser de la propia conserva de las anchoas, mejor aún.

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En mi casa, es costumbre de mi marido acompañar la legumbre a la hora de la comida con un encurtido; es una práctica que me llamó la atención cuando nos casamos. Si le preguntas el por qué de esta costumbre, te dirá que simplemente porque le gusta. Pero lo cierto es que hay una explicación científica, y es que los encurtidos, ya sean guindillas, pepinillos o cebolletas entre otros, facilitan la segregación de jugos gástricos, favoreciendo la digestión, un detalle interesante si tenemos en cuenta que las legumbres pueden resultar pesadas e indigestas considerando que contribuyen a la formación de gases gástricos ;)

Hace mucho tiempo que tenía antojo de encurtir guindillas puesto que en casa se consumen habitualmente, y no solo como acompañamiento de las legumbres, sino también como un ingrediente más entre otros que van con las hamburguesas que hacemos en casa. El problema es que no es fácil encontrarlas en Madrid, o al menos en la zona en la que yo vivo.

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Pero la ocasión la pintaron calva cuando en el regreso de nuestras vacaciones estivales pasamos por Logroño. Un paseo por el centro de la ciudad nos llevó al mercado de San Blas, y fue allí cuando me topé con un puesto de verduras en las que las piparras ocupaban un lugar más que sobresaliente. ¿Y cómo no? A casa que se vino una buena cantidad con el fin de encurtirlas y de freírlas.

Si en tu localidad puedes encontrar piparras fácilmente, y os gustan, te animo a encurtirlas. Su temporada comienza en julio y hasta octubre o noviembre puedes encontrarlas en el mercado. 

Receta de complejidad, cero. Y la satisfacción de disfrutar, y de hacer disfrutar en casa a tu familia de una elaboración hecha con tus propias manitas tiene un valor inigualable.

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Cómo hacer piparras (o guindillas verdes) en vinagre

Ingredientes
  • Guindillas verdes
  • Una cuarta parte de vinagre blanco
  • Una cuarta parte de agua
  • Una cucharadita rasa de sal
Utensilios
  • Uno o varios tarros de cristal de boca ancha limpios y secos
Elaboración
  1. Lavamos las piparras bajo el chorro de agua del grifo y las dejamos escurrir en un escurridor grande.
  2. Medimos la capacidad de líquido que entra en el tarro de cristal. Por ejemplo, el tarro de cristal que yo empleé admitía 400 ml de líquido, por lo que necesité 100 mililitros de agua y otros 100 mililitros de vinagre. Mezclé los líquidos aparte, junto con la sal, y lo reservé.
  3. Seleccionamos las piparras según su longitud (10-12 centímetros de largo) y descartamos aquellas que estén algo melladas.
  4. Vamos rellenando el tarro colocando las piparras bien juntas de manera que la punta quede abajo y el rabito quede arriba para así poder sacarlas con más facilidad. Iguala la rabitos cortándolos con unas tijeras para que todos tengan la misma longitud.
  5. Rellenamos con la mezcla de agua, vinagre y sal, y si fuera necesario rellenar con más líquido, lo hacemos a partes iguales y hasta casi el borde del tarro. Cerramos bien y guardamos en la nevera o en un lugar fresco durante tres meses. Notaremos cómo va cambiando el color de las piparras de verde a amarillo por efecto del vinagre. 
Notas y consejos
  • No es necesario esterilizar los tarros de cristal en los que vamos a conservar las guindillas, pues el vinagre ya funciona como conservante en sí.
  • Si el agua de tu localidad es dura, es recomendable emplear agua mineral en lugar de agua del grifo.
  • El vinagre ha de ser blanco.

Receta vista en Mercado Calabajío


10 comentarios:

  1. Hola!!, son deliciosas, y aquí desde luego las tomamos con las alubias de Tolosa en invierno y como bien has explicado fritas o en ese pintxo tan famoso en honor a Rita Hayworth, por ser "salado, verde y un poco picante"....te queria decir que yo vivo en San Sebastián, y que tenemos a Mai en común, así que cuando quieras "guindillas", por favor no dudes en pedirme, ahora ya no es temporada, pero el año que viene no tienes nada mas que comentarlo, además mis hijos los dos viven en Madrid y voy bastante.
    Un abrazo
    Marialuisa

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    1. ¡Hola Marialuisa!

      Muchas gracias por tu generosidad y por ofrecerte a conseguirme guindillas. Imagino que en algún mercado selecto de Madrid las venderán. Nunca he mirado porque ninguno me pilla cerca, pero siempre estará más cerca que cualquiera de San Sebastián o de Logroño, que es donde las compré, je je je. No es mi intención molestarte lo más mínimo por ello :D

      Besos y feliz finde!

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    2. Tranquila, si me había ofrecido es porque no es molestia en absoluto.
      Besos y feliz semana

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    3. Jo, muchas gracias de nuevo, Marialuisa.

      Pues llegado el momento, ya hablamos.

      Feliz semana :D

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  2. Uummmmmmmmmm en casa nos encantan aqui no las hay en la fruteria asi que las compro ,seguro que las que has echo estaban de muerte relenta no lo siguiente ,te han quedado de relujo.
    Bicos mil y feliz inico de semana wapa.

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    1. Nenalinda, no me acaba de quedar claro tu mensaje ... no hay guindillas en tu frutería y ... ¿las compras? Ummm. Pero lo que sí me ha quedado claro es que os gustan ;)

      Las mías aún están macerando en su tiempo reglamentario de espera, pero intuyo que han de estar muy buenas. Me vienen de buena fuente ;)

      Besos!

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  3. Tienen una pinta fantastica. Felicidades por tu receta

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  4. Buenos dias Maria Luisa!

    ¿No hace falta hacer el vacío al baño María después de embotar?

    Muchas gracias!

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    1. Hola,

      No. Yo no le hice el vacío. Y se conservaron bien. Pero siéntete libre de hacérselo si con eso te quedas más tranquila. No tiene por qué hacerle ningún mal.

      Por cierto, mi nombre es Yolanda ;)

      Saludos

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