Irish Blaa { Para Bake the World }
¡Bienvenidos a la entrada panarra del mes de octubre para Bake the World!
Muchos sabéis que este reto nos permite recorrer el mundo descubriendo panes de mil tipos. Nunca puedo resistirme a las propuestas que mes a mes nos lanzan Clara y Virginia. Pero es que la del mes de octubre se me hacía aún más difícil de resistir. No es que el blaa, el pan que hemos descubierto en esta ocasión, sea especialmente espectacular por su presencia, pues es un panecillo inundado de harina que guarda una miga que aunque algo prieta y de alveolos pequeñitos, es super tierna y jugosa, al igual que su corteza.
El motivo es que es un pan oriundo de tierras irlandesas, tierras que he tenido la suerte de recorrer, descubrir y disfrutar en mis pasadas vacaciones de verano, como ya he comentado en alguna entrada anterior. Pero que desafortunadamente no pude degustar in situ. De manera ... ¿que cómo no aprovechar la ocasión que ahora nos brindaba Bake the World para descubrirlo?
El pan blaa es un pan idolatrado en el condado de Waterford, situado en el sureste de la isla, y también en la zona sur del condado de Kilkenny y por el que nosotros pasamos de puntillas. Ha merecido el reconocimiento de recibir el sello de Denominación de Origen, y como tal, ha de cumplir con unos requisitos que hacen referencia a su forma, aspecto, ingredientes, peso, método de elaboración y zona geográfica en la que se elabora.
El sello de Denominación de Origen exige que los blaas sean de forma redonda o cuadrada, de color suavemente dorado, que estén totalmente embadurnados de harina, que durante la cocción hayan estado todos tan pegaditos unos a otros que al separarlos quede como marca la masa levemente abierta, y además, que entre los ingredientes no haya ningún producto químico.
Los blaa son parte del desayuno más típico de esta zona geográfica del sureste de Irlanda. Se sirven acompañando la típica taza de té y rellenos de abundante mantequilla. Hay estómagos fuertes que no pueden evitar rellenarlo de un tipo de salchicha de color rojo típica de aquella región, o de unas lonchas de bacon frito, aunque el bacon que se consume por allí no es la misma pieza que la que consumimos aquí en España, que es bastante más grasienta.
Como los ingredientes con los que se elabora son naturales, es un pan de corta durabilidad y es aconsejable comerlo en el día. Por eso se suele elaborar por la noche para tomarlo en el desayuno, o se trabajan los ingredientes por la noche para que reposen y así elaborar los blaa por la mañana.
Y esta es mi receta, extraída de un libro de panes que, ¡cómo no!, me traje de Irlanda en la maleta: Irish bread: Baking for today, de Valerie O'Connor.
Ingredientes (Para 4 blaas)
- 250 gr de harina de fuerza
- 150-170 ml de agua tibia
- 13 gr de levadura fresca
- 7 gr de sal común
Elaboración
- En un vaso vertemos un poco del agua que vamos a emplear y deshacemos en ella la levadura. Mezclamos bien.
- En un recipiente amplio ponemos la harina y la sal, y mezclamos. Incorporamos el agua con la levadura y mezclamos de nuevo, y por último vamos incorporando el resto del agua poco a poco. Amasamos durante un par de minutos, le damos forma de bola y guardamos la masa en un recipiente y tapada. Dejamos que repose quince minutos.
- Al cabo de este tiempo, amasamos de nuevo. Notaremos que la textura de la masa es más suave. De nuevo le damos forma de bola y la mantenemos descansando quince minutos más tapada.
- Vertemos la masa en una superficie de trabajo, amasamos hasta que quede una masa de textura suave y lisa, engrasamos ligeramente el recipiente en el que descansará toda la noche. Haremos lo mismo con la superficie de la masa. La tapamos y la dejamos en la nevera hasta el día siguiente.
- Una hora antes de comenzar a trabajar con la masa, la sacamos de la nevera. La desgasificamos, la dividimos en cuatro porciones, damos forma de bola a cada una de ellas, y las dejamos reposar durante una hora en una bandeja con abundante harina en la base y sobre la masa. La tapamos con un paño.
- Precalentamos el horno a 225ºC. Preparamos una fuente de forma cuadrada, preparamos una cama con abundante harina, aplastamos ligeramente cada bola de masa y las colocamos muy pegadas unas a otras. Espolvoreamos con abundante harina y tapadas.
- Introducimos los blaa en el horno y los cocemos a media altura bajando la temperatura a 200ºC y entre 20 y 25 minutos. No han de dorarse en exceso.
- Sacamos del horno, retiramos a una rejilla y dejamos templar para consumirlos.
Notas y consejos
- Si prefieres no dejar la masa durmiendo en la nevera toda una noche, puedes simplificar la receta en tiempos dejando reposarla tras el primer amasado hasta que doble su volumen. Ese primer amasado ha de ser más prolongado y hasta que la masa quede con una textura suave y lisa. Y a partir de ese punto, el procedimiento es el mismo que todo lo explicado anteriormente.
Se ve increíblemente tierno, ideal para desayunar, qué rico!! Bss.
ResponderEliminarYolanda, a mí me ha encantado este pan. Tu blaa tiene una pintaza!!, bss
ResponderEliminarConseguiste unos panes blaa magnificos!!! Con mantequilla tienen que saber riquísimos.Nos encontramos en el próximo reto Bake the World!! Besos,
ResponderEliminarCon la receta traida directamente de tu viaje juegas con ventaja, jaja. La verdad es que te han quedado estupendos. a mi me hubiese gustado saber o leer que se pondían en una bandeja todos juntos. Yo por cortar la masa me cargué un paño de cocina (lo hice con cutter), jeje
ResponderEliminarBss
Elena
Adoro fazer pão e por acaso não conhecia este .
ResponderEliminarVou levar a receita pois quero muito experimentar
Pues me acordé de ti cuando vi el reto, por Irlanda que siempre la tienes tan presente. Lo cierto es que es imposible conocer todos los panes del mundo mundial, por lo menos tú tenías un libro. A mí me han enamorado. Un beso
ResponderEliminarMonie
Me ha gustado mucho tu entrada con toda la información sobre el Blaa, ¡felicidaes!
ResponderEliminarUn abrazo
Vicky
Supongo que habrás disfrutado muchísimo con este reto. Yo cuando lo vi pensé en ti :)
ResponderEliminarTe ha quedado fantástico y me ha encantado toda la puesta en escena
besos
Un pan para no dejar pasar, me ha gustado mucho su historia y la obligación de que no lleven ningún químico, di que sí, que hay que tener ciertas exigencias. Con la mantequilla tiene que estar buenísimo, pero lo del bacon o la salchicha, para probarlo una vez en la vida tiene que estar de vicio. Besicos
ResponderEliminarQué buenos!!! y con receta original!!! olé panes te han quedado!
ResponderEliminarTe han salido estupendos :)
ResponderEliminarQue pinta tan rica, estos panes son una delicia calentitos para el desayuno.
ResponderEliminarAbrazos panarras.
http://mirecetario.es
Seguro que estás disfrutando de se maravilloso libro y ¡qué bien te ha venido para esta cita!
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