Cómo montar una tabla de quesos

{ 4 Comentarios }


como-montar-una-tabla-de-quesos

Vengo de una familia de queseros, entendido este término como de amantes del queso. Nunca, nunca jamás ha faltado queso en mi familia. No en vano, mis padres proceden de tierras castellanas, más en concreto de Tierra de Campos y desde pequeñitos nos han hecho partícipes de todo lo bueno que nace y se produce en su tierra: vino, queso, legumbres y fiambre. Siendo pequeña no sabía apreciar lo que ahora considero todo un tesoro. ¿Será que la edad nos hace valorar lo que nos enraíza con nuestros orígenes?

Esta introducción sirve como argumento para la entrada de hoy: Cómo montar una tabla de quesos. Con ella pretendo dar ideas de cómo presentar una tabla de quesos servidos como entrante a una comida o como opción a un picoteo. En tierras francesas, sin embargo, es bastante común servir una tabla de quesos como postre. 

Clasifiquemos los quesos

  • Por maduración: fresco, tierno, semi curado, curado, viejo, añejo.
  • Por tipos de leche en origen: vaca, cabra, oveja, mezcla.
  • Por intensidad de sabor
    • Fresco o dulce: Burgos, AfuegaL'Pitu, Savarin, Loira, Cebreiro, Burrata, Mozzarella, requesón
    • Poco pronunciado: Camembert, Reblonchon, Coulommiers, Provolone, Cabezuela, Arzúa Ulloa, Tetilla
    • Intensidad pronunciada: Grana Padano, Lancashire, Pata de mulo, quesos ahumados, de leche prensada de cabra
    • Intensidad fuerte: Cheddar, Parmesano, Pecorino, Fontina, Tete de Moine, Gruyere
    • Intensidad muy fuerte: En general, los quesos azules, como por ejemplo Stilton, Cabrales, Roquefort, Gorgonzola, La Peral, Gamoneu 

Cómo organizar la tabla de quesos

  • Distribuye los quesos en la tabla ajustándote a la idea que hayas elegido para presentarlos. La idea es organizarlos según el modo que recomiendas consumirlo, preferiblemente siguiendo las agujas del reloj, y lo aconsejable es comenzar por los quesos suaves y terminar por los de sabor más intenso (azules).
  • No montes unos quesos sobre otros, pues todos han de estar visibles.
  • Dispón diferentes cuchillos, uno por cada tipo de queso, de manera que no se mezclen sabores por compartir el cuchillo.
    • Para cortar quesos blandos, como un Camembert, usa un cuchillo con agujeros en el filo de la hoja. Si se trata de un queso untable, dispón un cuchillo de punta redonda y sin filo.
    • Para cortar quesos frágiles como un Roquefort, podemos usar un cuchillo de alambre o lira.
    • Para cortar quesos duros o semiduros, emplea un cuchillo con doble mango.

Con qué acompañar los quesos

  • Pan:
    • Hoy en día tenemos tanta variedad en el mercado, que es una opción ineludible. Si decides elegir pan, pan, en mi opinión los mejores son el pan candeal (de miga prieta), chapata o un pan payés, de sabores neutros.
    • Si eliges otro tipo de pan, evita que sea de sabores como al ajo o a las hierbas, puesto que podrían distorsionar el sabor individual de cada queso. Van bien los panes con frutos secos o con aceitunas.
    • Otra opción son los panecillos, tostadas o crackers. Existe una variedad muy acertada que son las galletas de queso o las de agua, unas galletas tipo crackers super finas y crujientes.
  • Frutas frescas. Su dulzor resaltará el sabor del queso por el contraste dulce-salado.
    • Uvas, ideales, y no en vano existe un dicho que dice: "Uvas y queso saben a beso".
    • Peras, combinación perfecta con quesos maduros.
    • Manzanas, que van muy bien con los quesos azules. La manzana ácida, tipo Granny Smith, ayuda a limpiar la boca dejado una sensación fresca.
    • Higos, para acompañar quesos azules o de cabra.
    • Fresas o frutos del bosque para los quesos tiernos.
  • Frutas secas:
    • Dátiles, higos desecados, uvas pasas u orejones, que aunque van muy bien con todo tipo de queso, casan especialmente bien con los curados.
  • Frutos secos:
    • Nueces, avellanas, pistachos, y preferiblemente tostados.
  • Otros: miel, mostaza, fiambre y aceitunas

Algunos consejos

  • Para apreciar el sabor característico de cada tipo de queso es aconsejable mantener la tabla a temperatura ambiente desde al menos media hora antes de presentarla. 
  • Si presentas quesos con corteza, no te molestes en cortarla y retirarla antes. Pero lo que sí es aconsejable es servirlo cortado en lonchas.
  • Si presentas quesos pequeños enteros, corta un triángulo y sepáralo ligeramente del resto de forma que se pueda ver su color y textura.
  • Quesos tipo Gouda pueden ser presentados en taquitos o en trocitos de tamaño irregular.
  • En el momento de distribuir los quesos en la tabla, altérnalos con otros ingredientes: frutos secos, frutas frescas, fiambres, miel, mermeladas, chutneys.

4 comentarios han dado alegría a esta entrada:

Si tienes alguna consulta, te responderé en cuanto me sea posible. También puedes escribir un correo a cocidodesopa@gmail.com.
Muchas gracias por tus palabras y tu tiempo.

Bolas de patata rellenas de mantequilla de anchoa, una guarnición ideal

{ 2 Comentarios }


bolas-de-patata-rellenas-de-mantequilla-de-anchoa

Todos los años ocurre, y este no iba a ser menos. Llegan las fechas que nos van aproximando a la Navidad y lógicamente, empezamos a preocuparnos, y a ocuparnos, de cuáles serán los platos que estarán en nuestras mesas.

Puede que tú ya hayas organizado tu menú, que hayas hecho la compra y que incluso ya tengas algún paso adelantado. No es mi caso. Así que más vale que espabile o como se dice coloquialmente ... ¡me va a pillar el toro!

La receta de hoy puede ser la guarnición que acompañe a tu plato fuerte, sea carne o sea pescado, porque la patata es amiga de todos y combina perfectamente bien con producto de mar o de tierra.

Estas bolas de patata rellenas de mantequilla de anchoa son un acompañamiento perfecto. De ellas me encanta la suavidad de la patata convertida en puré, y cómo una burbuja de mantequilla de anchoas que explota en la boca.


bolas-de-patata-rellenas-de-mantequilla-de-anchoa

Receta de Bolas de patata rellenas de mantequilla de anchoa



Ingredientes (Para 12 unidades o 4 personas)
  • 600 gr de patatas
  • 2 huevos tamaño "L"
  • 75 gr de mantequilla a temperatura ambiente
  • 1 diente de ajo grande
  • 6 filetes de anchoa
  • 1 cda de perejil picado
  • Ralladura de 1 limón
  • Harina para enharinar las bolas
  • Pan rallado para empanar las bolas
  • Aceite de oliva para freír
Elaboración
  1. Ponemos agua abundante en una cazuela. Lavamos la piel de las patatas y las incorporamos en el agua cuando este empiece a hervir. Añadimos sal y las cocemos entre 15 y 20 minutos, dependiendo del tipo de patata. Escurrimos y las reservamos hasta que pierdan temperatura para poder manipularlas y pelarlas. Entonces las pelamos y las aplastamos con un prensador de  patatas y rectificamos de sal si fuera necesario.
  2. Mientras tanto machacamos el diente de ajo junto con el perejil y los filetes de anchoa. Formaremos una pasta que añadiremos a la mantequilla. Agregamos la ralladura de un limón y mezclamos todo. Tapamos con film transparente y reservamos en la nevera hasta el momento de su uso.
  3. Dividimos la patata aplastada en doce porciones. Cogemos una de ellas y la rellenamos con una cucharadita de mantequilla, envolviéndola con la patata como si fuera un paquete que tenemos que cerrar y sellar. Reservamos y continuamos con el resto.
  4. Batimos los dos huevos y preparamos dos platos, uno con harina y el otro con el pan rallado. Primero enharinamos las bolas y a continuación las enhuevamos y por último las pasamos por el pan rallado. Reservamos las bolas en un plato a medida que las vamos formando.
  5. Preparamos una sartén honda o un cazo pequeño con aceite a calentar para freír las bolas de patata por pequeñas tandas, dándoles la vuelta de poco en poco para que se doren uniformemente. Retiramos a un plato amplio protegida con papel de cocina para que escurra el exceso de grasa. ¡Y listo!



2 comentarios han dado alegría a esta entrada:

Si tienes alguna consulta, te responderé en cuanto me sea posible. También puedes escribir un correo a cocidodesopa@gmail.com.
Muchas gracias por tus palabras y tu tiempo.

Gingerbread men cookies { Galletas de muñecos de jengibre }

{ 0 Comentarios }


galletas-muñecos-de-jengibre

Gingerbread men cookies -  {Galletas de muñecos de jengibre }


Jengibre, nuez moscada, canela, pimienta, clavo ... ¿eres capaz de oler estas especias? 

Sí. Ya sé que uno de los grandes avances de la tecnología aún por descubrir es poder disponer de algún artilugio que nos permita sentir los olores. ¿Quién nos dice que no pueda ser una realidad de aquí a unos años? 

Por el momento solo nos queda la opción de cerrar los ojos y echar nuestra imaginación a volar intentando emular los aromas que desprenden estas cinco grandes especias que tan apreciadas son en muchos países del norte de Europa. La verdad es que tienen un algo que emanan exotismo y calidez, ¿no te parece?

galletas-muñecos-de-jengibre


Una de las elaboraciones donde la mezcla de estas cinco especias tiene un especial protagonismo es  la de las galletas de muñecos de jengibre (gingerbread men cookies). Puede que no hayas visitado ningún país del norte y este de Europa, o de Estados Unidos, o del Reino Unido para ver que estas galletas son adoradas. De lo que sí estoy segura es de que habrás visto, al menos alguna secuencia, la película Shrek, donde aparece un simpático muñeco de jengibre. No en vano, este hombrecillo de galleta es el personaje de un cuento en el que cobra vida y corre y corre huyendo de su creadora y de todo ser que se le interpone en el camino. Y si has visto la obra "El Cascanueces", te recuerdo que ahí aparecen en regimiento.

Esa era la ficción, porque en realidad, estas galletas nacieron en la corte de la reina Isabel I de Inglaterra, tiempos esplendorosos y de hegemonía política, tanto, que la reina podía permitirse el lujo de tener entre su séquito una persona encargada de hacer figuras de hombrecillos representando a dignatarios políticos de la época tanto de su corte como de cortes extranjeras. Apuesto el cuello a que había una de Felipe II ;)

galletas-muñecos-de-jengibre


Curiosamente, por aquel entonces, las deliciosas y sabrosas galletas de jengibre no contaban con este ingrediente en su elaboración, y poco tenían que ver con la crujiente textura que tienen hoy en día. Muchos siglos han pasado desde entonces, y por muchas manos la receta original, y eso ha hecho que la receta actual poco tenga que ver con la de antaño. Sin embargo, la tradición de tomarlas en tiempo de Navidad se ha mantenido durante siglos. 

En muchos hogares de las Islas Británicas, de Alemania, de los Países Bajos, Francia y Estados Unidos habrá un platito lleno de estas simpáticas galletitas en Navidad. 


Receta de Gingerbread cookies { Galletas de muñecos de jengibre}



Ingredientes (Para 21-22 galletas)


Para las galletas
  • 200 gramos de mantequilla sin sal a temperatura ambiente
  • 150 gramos de azúcar granulado
  • 1 huevo tamaño "L"
  • 350 gramos de harina de trigo común
  • 2 y 1/2 cdtas de mezcla de especias
    • 1 cdta de jengibre molido
    • 1/2 cdta de nuez moscada molida
    • 1/2 cdta de canela molida
    • 1/2 cdta de pimienta de Jamaica
    • 1/8 de clavo molido
Para la glasa
  • 100 gr de azúcar glas
  • 2 cdas de leche
  • 1/4 cdta de extracto de vainilla
Además
  • Dos bandejas de horno
  • Rodillo
  • Cortapastas con forma de muñeco de jengibre
Elaboración
  1. En el vaso de un robot de cocina batimos la mantequilla con el azúcar durante 5 minutos.
  2. Añadimos el huevo. Batimos de nuevo hasta que el huevo se haya incorporado.
  3. Agregamos la harina y la mezcla de especias y mezclamos sin amasar en exceso.
  4. Dividimos la masa en dos partes, las aplastamos levemente y envolvemos cada una de ellas en film transparente. Refrigeramos durante una hora.
  5. Preparamos dos bandejas de horno, forrándolas con papel de horno. 
  6. Transcurrido ese tiempo, horneamos las galletas en dos tandas. Extendemos la masa entre dos trozos de film transparente hasta lograr un grosor de 4 milímetros. Cortamos las galletas con la ayuda de un cortapastas con la forma de un muñeco de jengibre y los disponemos sobre la bandeja de horno. No es necesario dejar mucho espacio de separación, pues las galletas no se expanden durante la cocción. Guardamos la bandeja en la nevera durante 15 minutos.
  7. Mientras la bandeja está en la nevera, precalentamos el horno a 180ºC, con calor superior e inferior. 
  8. Sacamos la bandeja de la nevera, la introducimos en el horno, a media altura, y horneamos entre 12 y 15 minutos.
  9. Estiramos la otra mitad de la masa siguiendo los mismos pasos que con la anterior. E igualmente la horneamos.
  10. Dejamos reposar las galletas en su bandeja durante unos 5 minutos y después las pasamos a una rejilla. 
  11. Para elaborar la glasa, mezclamos todos los ingredientes, los introducimos en una bolsa con autocierre o en una manga pastelera, haciendo un corte muy fino en la punta, y decoramos los muñecos a nuestro gusto.

0 comentarios han dado alegría a esta entrada:

Si tienes alguna consulta, te responderé en cuanto me sea posible. También puedes escribir un correo a cocidodesopa@gmail.com.
Muchas gracias por tus palabras y tu tiempo.

Kanelbullar { Bollos de canela suecos }

{ 6 Comentarios }

cinnamon-buns

Kanelbullar - { Bollos de canela suecos }


No sé qué fue lo que se pasó por mi mente para que un día se me antojara comer bollos de canela, pero tampoco creo que sea importante indagar sobre ello. Lo que realmente importa es que el resultado de aquel antojo se materializó convirtiéndose en una realidad.

Indagando por la red encontré que hay dos tipos de bollos de canela. Por un lado tenemos los cinnamon rolls, de origen norteamericano, que se distinguen porque van cubiertos de una glasa de queso crema y azúcar; y por otro lado están los kanelbullar, procedentes de Suecia, y que se presentan espolvoreados de azúcar perlado o almendra laminada.

De entre los dos me decidí por hacer los bollos de canela de mis vecinos europeos, y porque sí, porque me apetecían más; en mi poder cuento con un libro de recetas de repostería nórdica. El resultado es el que ya habéis podido ver en la fotografía de cabecera (y puede que hayáis bajado la vista a ver las demás, je je je). La masa es muy suave, muy manejable y nada pegajosa a la hora de trabajarla, por no hablar del inconfundible y embriagador aroma de la canela en toda la casa llegado el momento del horneado.


kanelbullar-bollos-de-canela



Una vez salidos del horno, la masa es muy tierna y suave y hay que ser muy fuerte para no dejarse tentar para un segundo bollito. Eso sí, hemos de tener en cuenta que la masa, tipo brioche, está estupenda recién horneada, y sin embargo, al día siguiente, pierde elasticidad y suavidad. Así que es conveniente comerlos cuanto antes. Imagino que problema ante esto, ninguno, ¿verdad?

Es costumbre en Suecia tomarlos acompañarlos al típico café de media mañana o de media tarde, costumbre conocida con el nombre de "fika". Esta costumbre merece tal respeto que son muchas las  empresas suecas que proponen como obligación este hábito. Es un momento para entablar relaciones sociales en el trabajo, y eso, según los expertos, potencia la productividad laboral. Así que ... pon un kanelbullar en tu vida.

cinnamon-bun-kanelbullar


Sobre el formado de los kanelbullar, existen diferentes formas. Puede que los veas con la forma de un cilindro enrollado, o bien con la forma de unas tiras entrecruzadas que se enrollan sobre sí mismas. Y pueden llevar unos granos de azúcar perlado encima o bien unas láminas de almendra. ¿Cómo te gustan más?

Por mi parte, que no quede, y te dejo esta maravillosa receta que te animo a hacer a no mucho tardar.


kanelbullar-bollos-de-canela-suecos



Receta de kanelbullar o bollos de canela



Ingredientes (15 unidades)


Paso 1
  • 25 gramos de levadura fresca de panadero u 8 gramos de levadura deshidratada
  • 200 ml de leche a temperatura ambiente
  • 1 cdta de azúcar granulado
  • 130 gr de harina de trigo de fuerza
Paso 2
  • 260 gr de harina de trigo de fuerza
  • 65 gramos de azúcar
  • 1/2 cdta de sal común
  • 1 cdta de cardamomo molido
  • 75 gr de mantequilla sin sal derretida
Para el relleno y barnizado
  • 25 gr de mantequilla sin sal a temperatura ambiente
  • 3 cdas de azúcar moreno o demerara
  • 2 cdas de canela en polvo
  • 1 huevo batido (para barnizar)
  • Azúcar perlado (para decorar)
Utensilios
  • Un rodillo
  • 2 bandejas de horno
  • Papel para hornear
kanelbullar-bollos-de-canela



Elaboración
  1. Para el paso 1, en un recipiente de tamaño mediano ponemos la leche, la levadura fresca desmenuzada, el azúcar y la harina. Mezclamos, tapamos con  un gorro de ducha y esperamos diez minutos hasta que se active. Si la temperatura de tu casa no es muy alta, mantenla en reposo hasta que veas que se empiecen a formar burbujitas en la superficie.
  2. Para el paso 2, en un recipiente amplio mezcla la harina con el azúcar, la sal y el cardamomo. Añade la mezcla a la masa activada e incorpora la mantequilla derretida. Mezcla todo bien con la ayuda de una espátula, vuelca la masa en una superficie y amasa durante 10-15 minutos o hasta que se hayan integrado los ingredientes y quede una masa suave y homogénea. Deja reposar la masa en un recipiente tapado con un gorro de ducha durante una hora o hasta duplicar su volumen.
  3. Mientras tanto, mezclamos los tres ingredientes del relleno: la mantequilla, el azúcar y la canela, y lo reservamos.
  4. Transcurrido el tiempo de reposo de la masa, la volcamos sobre la mesa de trabajo, descalificamos durante un par de minutos, formamos una bola y la aplastamos para comenzar a darle forma de un rectángulo de 30x50. Repartimos la mezcla del relleno con una espátula, cubriendo toda la superficie, y enrollamos con firmeza desde el lado más largo. Cortamos porciones de tres centímetros de ancho, desechando los extremos, que suelen quedar no solo más feos, sino con menos relleno.
  5. Forramos dos bandejas de horno con papel para hornear. Cogemos uno de los bollitos y doblamos el extremo escondiéndolo bajo el bollito, y lo colocamos en la bandeja de horno. Proseguimos de la misma manera hasta tener todos los bollitos listos. Tapamos y dejamos reposar durante 30 minutos.
  6. Diez minutos antes, encendemos el horno a 200ºC con calor inferior y superior.
  7. Pincelamos con el huevo batido, espolvoreamos azúcar granulado por encima e introducimos una de las bandejas en el horno. Horneamos los bollitos de canela 10-12 minutos o hasta que estén ligeramente dorados.

Receta vista en Nordic Bakery Cookbook, de Miisa Mink. 



6 comentarios han dado alegría a esta entrada:

Si tienes alguna consulta, te responderé en cuanto me sea posible. También puedes escribir un correo a cocidodesopa@gmail.com.
Muchas gracias por tus palabras y tu tiempo.