SORPRESAS DE ZANAHORIA ... ¡MORADA!
Cinco grandes mujeres con red lips nos reunimos hace apenas dos semanas en un restaurante: Piú di Prima. Hablar de Piú di Prima es hablar de buen gusto elevado al máximo nivel, y no solo por la riqueza de su menú, de corte italiano, y con ingredientes traídos directamente de su país autóctono, sino por el encanto del local en sí: sobrio, elegante, con espacios que gozan de una iluminación intimista y acogedora que hace aún más agradable la estancia. Conocer y tratar a su anfitriona, Ana, editora del blog Tomates verdes fritos es un anticipo para darse cuenta de que todo lo que le rodea presume de la etiqueta de "buen gusto".
Ana era una de esas grandes mujeres con red lips, pero no la única. La excusa de encontarnos en su restaurante la tuvieron otras dos grandes mujeres a las que tuve la suerte de conocer en la primera quedada que Tito organizó en Madrid en octubre de 2011: Juana y Caty, y a quienes seguramente muchos conoceréis a través de sus blogs: La cocina de Babel y Circus Day, respectivamente. Fue a estas dos mujeres a quienes se les vino a la cabeza la ocurrencia de venir a Madrid a un curso de pan en La Bolboreta. Y de forma casi inesperada e improvisada surgió la idea de compartir mesa en una cena. Conocer a Juana y a Caty es tratar con la dulzura y la cadencia personificadas. Es como que todo a tu alrededor se cargara de un karma que te transmite una gran dosis de serenidad. Me encantó conocerlas un poquito más y charlar como lo hicimos en petit comité, junto con otra gran amiga, Carmen; Ana, ya mencionada, y dos blogueras más metidas en este mundillo gastronómico: Aurélie, de La Chef A, y otra Carmen, de Rezetas de Carmen.
Pero Juana y Caty no viajaron solas. En su maleta trajeron un regalito para cada una de nosotras: unas zanahorias de color ... ¡morado! Yo me quedé alucinada por el detalle, y maravillada ante la idea de tener en mis manos unas zanahorias moradas y de las que poco sabía más que lo que había visto en el blog de Caty con su crema de zanahoria morada, que es un impacto visual.
Cuando llegué a casa y se las mostré a mi marido me sorprendió lo que me contó sobre ellas y que había visto en un documental en televisión: parece ser que hace muchos, muchos siglos, las zanahorias eran moradas, pero los franceses buscaron la manera de hacerlas más atractivas mediante diferentes experimentos, y lograron un color naranja que es el que hoy en día tenemos en nuestros mercados. A mi me ha parecido una zanahoria preciosa. De corazón blanco y carne morada; de sabor dulce y un ligero y suave toque picantillo muy curioso.
Aquella noche, Piú di Prima fue testigo del compromiso que adquirieron cinco mujeres de agradecer el detalle a esas otras dos amigas que habían llegado desde Mallorca, publicando una receta elaborada con tan rico ingrediente y autóctono de la isla de Mallorca.
Mi propuesta emula mucho el aspecto que tiene una zanahoria morada al cortarla en rodajas. Se trata de unas croquetas de zanahoria que contienen un trozo de queso como sorpresa, que volaron en un pis pás del plato, y que nos encantaron al primer bocado. No hay duda de que también se pueden elaborar con zanahorias naranjas.
Estas son las propuestas de mis otras compañeras de batalla:
Carmen - Tía Alia Recetas
Carmen - Rezetas de Carmen
Aurélie - La Chef A
Ana - Tomates verdes fritos
No tenéis por qué elegir la mejor, porque todas lo son.
Ingredientes (Para 10 croquetas)
- 150 gr de zanahoria morada
- Media cucharada de mantequilla
- 2 cdas de queso parmesano rallado
- Un taco de un centímetro de grosor de queso de cabra suave
- Una pizca de nuez moscada
- Sal
- Agua
- 1 huevo, harina y pan rallado para empanar
Elaboración
- Pelamos y cortamos en rodajas de un centímetro de grosor las zanahorias.
- Ponemos agua con sal a cocer al fuego y cuando rompa a hervir incorporamos las zanahorias al agua. Cocemos durante una media hora o hasta que estén tiernas. Dejamos escurrir, y si quedara algún excedente del agua de la cocción las podemos envolver en papel de cocina y aplastar con cuidado para ayudar a eliminar el agua.
- Secamos el cazo con papel de cocina y ponemos la mantequilla a derretir. Incorporamos las zanahorias y las salteamos.
- Trituramos las zanahorias, batimos el huevo y añadirmos la mitad, reservando la otra mitad para empanar. Añadimos el queso parmesano rallado, el pan rallado, la nuez moscada y rectificamos de sal si fuera necesario. Mezclamos muy bien y dejamos enfriar.
- Cortamos el taco de queso en cuadraditos del tamaño de un centímetro.
- Nos preparamos para el empanado. En un recipiente ponemos harina, en otro la mitad del huevo batido sobrante y en otro el pan rallado - el tipo cracker queda muy bien para estas frituras. Vamos cogiendo pequeñas porciones de la crema de zanahoria, ponemos un cuadradito de queso en su interior y le damos forma de bola de manera que el queso quede perfectamente protegido en su interior y que no se escape en la fritura. Pasamos cada bolita en este orden por harina, huevo batido y pan rallado. Reservamos.
- En un cazo pequeño y hondo ponemos aceite a calentar. Una vez que el aceite llegue a la temperatura idónea vamos friendo las croquetas por pequeñas tandas y removiendo a medida que se van dorando. Retiramos a un plato con papel de cocina.
Con algunos cambios, esta receta se encuentra en La Cuchara de Plata.
Un pincho magnífico, qué ganas de probar esas zanahorias moradas!!
ResponderEliminarAprendemos muchísimo con tus recetas, gracias.
un abrazo
Impresionante tu sorpresa de zanahoria morada, me encanta Caty, está llevando a toda España la zanahoria morada, jajaj, a mí también me llegó por otras vías, jaja, bsss
ResponderEliminarEs una receta estupenda, y esas zanahorias tan diferentes, que ganas de plantarlas en el huerto. Por cierto, unas fotos sublimes. Un besazo, me quedo por aquí.
ResponderEliminarhttp://hechoenlapropiete.blogspot.com.es/
no conocia estas zanahorias moradas y hoy ya es la segunda que veo!! que ganas de probarlas me estan entrando, unas sorpresas fantasticas! bicos
ResponderEliminarHola Yolanda, ya veo que no paras y ya leí sobre la reunión que habéis tenido y sobre esas zanahorias moradas...todo un lujo.
ResponderEliminarEsta preparación es una auténtica delicia, me encanta!
Quien viviese en Madrid y poder asistir a esos eventos!
Besos
Seguro que lo pasásteis de cine, ¡qué buenos momentos y encuentros salen de los blogs!
ResponderEliminarLa propuesta me parece muy cuca y ahora voy a ver las demás, que seguro que son todas estupendas, conociéndoos.
Besos.
Nunca he visto ese tipo de zanahoria!!me quedo por aquí a seguirte que bonito tu blog
ResponderEliminarYo tampoco he visto nunca esas zanahorias¡¡tendré que buscarlas¡
ResponderEliminarUn saludo, Manuel.
Nunca habia visto estas zanahorias y se me ocurren un monton de cosas!! me ha gustado mucho como las has elaborado tu !
ResponderEliminarNo tenía ni idea de la existencia de estas zanahorias. Quizá cuando vaya a Mallorca tenga la suerte de probarlas!
ResponderEliminarSoy fan total de todo tipo de croquetas y las de zanahoria moradas me gustarán seguro. Me encantan las fotos!!!
Besos
Que suerte conocer a estas mujeres blogueras tan conocidas y admiradas por toda la red.
ResponderEliminarNo he probado las zanahorias moradas y menos aún las he visto en el mercado, son de lo más originales.
Besotes
Qué originales estas zanahorias, nos encantaron cuando las probamos hace bien poco de la forma más natural que se nos ocurrió. La receta que nos traes hoy tiene que ser una delicia!!
ResponderEliminarSi ya me encantaron cuando se las vi a Caty , ahora que he visto tu receta y la de Carmen, me han enamorado completamemte. Cuando me pase a disfrutar de las recetas que me quedan me van a dar ganas de volar a las islas , hacer una visitilla a Caty y hacerme con las preciosas zanahorias. Tus bolitas moradas con corazón de queso quedaron de rechupete. Mil besitos.
ResponderEliminarMe ha gustado la receta, pero sobre todo me ha gustado tu relato. Preparate que al final TENGO PLAZA¡¡¡¡¡¡ Bss
ResponderEliminarVirginia "sweet and sour"
Yolanda que arte, que croquetas más vistosas y seguro que más apetitosas !!!!
ResponderEliminarla verdad es que Caty y Juana son dos PERSONAS INCREIBLES, con un corazón enorme.
Besazos
Vaya, parece que las zanahorias moradas se han puesto de moda, no??
ResponderEliminarDesde luego tu receta es estupenda.
Bs
No conocia yo las zanahorias moradas!! Y éstas sorpresas son ideales, por el color y por la combinación de sabores!!
ResponderEliminarGracias, gracias por hablar tan bonito de nosotras Yolanda!!!!!, me he emocionado!!!... es tan gratificante que una persona a la que estimas y admiras por muchas razones, diga esas cosas ti :)
ResponderEliminarMe alegro de de que te hayan gustado las zanahorias y mira!, yo no tenia ni idea del porque de que fuesen moradas...bueno, más bien es al revés..no tenia ni idea de que fueron los Franceses que las modificaron para hacerlas más sexis y atractivas ;)...tus bolitas son perfectas y no dudo de que volaron al servirlas...yo las habría hecho volar al igual que hicimos con las croquetas de queso del Piu ;)
Lo pasamos relindo con vosotras y te aseguro que no me hace falta más excusa para ir a veros que el ir a cenar de nuevo con mujeres de redlips maravillosas!!!!
Nos vemos pronto en el Piu ;)
La verdad es que por aquí aún no he visto la zanahoria morada pero en cuanto la pille me pondré manos a la obra porque nos estáis trayendo unas recetas de lo más apetitosas.
ResponderEliminarUn besito desde Las Palmas.
Estas sorpresas son las que me gustan, divertidas, agradecidas y especiales. Tengo que aplaudiros a todas, estoy gratamente sorprendida y emocionada.
ResponderEliminarMe alegra saber que tú marido sabía de ellas, así me pasó a mi durante mucho tiempo ya que mi madre y abuela hablaban sobre ellas en referencia a un "frito mallorquín" que lleva este ingrediente, pero con el tiempo quedó olvidada pues dejó de cultivarse por lo que no tuve ocasión de probarla hasta que hace unos años la recuperaron.
Mi sorpresa se ha hecho mayor al ver tú receta, veo que usaste la imaginación al querer simular la zanahoria por dentro, y eso me agrada mucho pues mi pequeña colección de recetas con esta zanahoria se agrandará, y porqué se ven tan ricas. Pronto se acaba la temporada de zanahorias, ya sabéis que la producción aquí es pequeña y ecológica por lo que no sé hasta cuando podré aprovecharme. Pero si llega a su fin y no puedo hacer vuestras recetas, otro año vendrá con ilusión.
Gracias guapa por todo, de verdad que es un gusto leerte siempre. Me gustó mucho la reunión con todas y espero se repita algún día, será un placer.
Un besazo
Qué rico Yolanda!! Yo sí he utilizado muchas veces estas zanahorias, pero casi siempre en ensalada, porque me encanta el color tan chulo que tiene. Un besazo
ResponderEliminarQué bueno, Yolanda. Creo que lo debe de saber hasta el apuntador ¡nunca he podido tener zanahorias moradas en mis manos! No sé si el día que lo consiga, las deje en un florero y les componga una oda. Muy apetecible tu receta. Tengo "La cuchara de plata" pero no pienso ponerme a mirar. Seguro que la receta en la que te has inspirado es menos ingeniosa que la tuya. Cuando tu me digas, voy a tu casa a probarlas. Encantada. Besazos.
ResponderEliminarAlaaaaa, alucinada me he quedado! Y no hay color que me guste más que el morado, desde luego, esos franceses... la receta espectacular....sigo con la boca abierta! Biquiñosss
ResponderEliminarQué color tan lindo, Yolanda. Por aquí no me ha parecido ver jamás esas zanahorias, así que, evidentemente, tampoco las he probado. Me fijaré más por si...
ResponderEliminarLas sorpresas son realmente sorpresas con ese color.
Besitoissssssssssssss
Que velada mas agradable debisteis de pasar! Y que buena pinta que tienen estas zanahorias. Las había visto ya en el blog de Caty y me enamoraron. A ver si pronto las podemos encontrar en los mercados... Te ha quedado una receta estupenda!! Un beso
ResponderEliminarEn Tarragona tenemos un payés que está recuperando el cultivo de una zanahoria morada muy dulce. Una muy buena propuesta Yolanda.
ResponderEliminarNani
Si existe una asociación de zanahorias moradas, nos van a dar la enhorabuena, que recetas tan bonitas estais preparando. Me encanto la cena, a ver cuando repetimos, habrá que buscar otro ingrediente loco que nos sirva de inspiración!
ResponderEliminar¡Qué pena no tener unas zanahorias de esas a mi alcance! Al año que viene a ver si me agencio con tiempo unas semillas para ponerlas en mi huerta. ¡Tus croquetas tienen que estar deliciosas!
ResponderEliminarSaludos
Cristina
Te digo como a Carmen: ¡¡¡¡Zanahoria morada!!!. Sabia que la zanahoria puede ser de cualquier color pero que es naranja en el 90 y tantos por ciento de la produccion mundial por capricho de un jefe de estado o rey o lo que sea holandes. Eso tengo yo entendido. En todo caso tremenda curiosidad me habeis dado de probarla y ¡¡como la pille!! cae, ya lo creo jeje
ResponderEliminarAh! tu bolita me encanta, de aspecto (es que no sé a qué sabe la zanahoria morada:()
Un besin
;)
ohhh, qué bocados más ricos!!! Es muy curiosa esta zanahoria morada, y parece rara, verdad???
ResponderEliminarYo en cambio oí por la radio que antes las zanahorias eran de muchos colores, pero que fueron los holandeses los que impusieron su color nacional. Habrá que investigar en profundidad.
Una pregunta, y de sabor??? Son como las naranjas??
Besos. Paula
Que maravilla de receta y que original!!! Las fotos son geniales Yolanda!!!
ResponderEliminarUn besito,
Sandra von Cake
Ay Yolanda, que te digo lo mismo que a Carmen, que la envidia me corroe con esas zanahorias. Qué buena pinta tienen y qué buenas sorpresas has preparado :D
ResponderEliminarAl ver tus fotos (preciosas, por cierto) y ver esas blondas que has utilizado me acuerdo de esa conversación que tuvimos en la que hablamos de que vamos apañando todo por ahí pero mira qué bien luce luego ;)
Besos guapa
menos a Aurelie ya he tenido la suerte de conoceros en persona así que esa reunión en el restaurante de Anna fue sensacional y magica.No había visto una zanahoria morada hasta tu foto.La croqueta esta sublime¡¡
ResponderEliminarbeso
He visto varias propuestas con esta zanahoria morada y la primera vez que la vi me quede anonada, pensando que era un injerto, pero tu me has abierto los ojos y la mente, gracias a tu marido, que te ha dado una muy buena información, desde luego el aspecto de la zanahoria es sublime y como me gustaría probarla, decirte que esasa croquetas ha sido una propuesta expectacular y que nadie como tu tiene la podría haber hecho mejor.
ResponderEliminarPor cierto, con respecto al aceite de oliva virgen calidad Picual, tienes razón, con respecto al gusto es más consistente, pero como la pretensión es que me salieran un poco rusticas, como se hacían antaño, que no había diferencia entre un aceite y otro, no es como ahora que tenemos diferentes tipos de aceite, con diferentes graduaciones y con diferentes intensidades, lo propio a lo mejor hubiera sido un aceite de girasol, que es mucho más suave, pero porque no darle un toque más intenso, jejeje, besos
Sofía
Yolanda, qué delicia y qué buen ideaaaa!!
ResponderEliminarEso de reproducir el corte de la zanahoria, me ha alucinado!
Luego, el formato croquetas y con el toque del queso de cabra fundido, es que es... Lo más!!
Qué artistaza!
Yo, cuando metí las zanahorias en el horno, justo pensé que tenía que haber probado una cruda como tú...¿Se parecen a las naranjas en crudo?
Lo dicho, una receta maravillosa, de matrícula! ;-)
Besos!
Yolanda, querida, menuda crónica más completa. Te ha faltado poner de qué color íbamos vestidas y nuestros números de carné de identidad...jajaja. No se puede estar en todo ¡eh! Seguro que tenías ganas de meterte en faena con la receta y ahí te has despistado :)
ResponderEliminarTu has tirado a lo salado, yo a lo dulce. Me encanta la variedad de usos que le hemos dado cada una de nosotras. Ninguna ha repetido receta. Es curioso ¿verdad?
El intento por emular el corte de la zanahoria en tus "sorpresas" me gusta muchísimo. Es muy "tu". Así como es muy "tu" también que no hayas llamado croquetas a estas bolitas sino sorpresas. Mira que que gusta buscar nombres nuevos para las recetas que salen de tu cocina. Esa inventiva, esa cabecita...no paran !!!
Bss
Me parece super atractiva tu propuesta! Y yo que no encuentro zanahorias moradas... ains.
ResponderEliminarBesos
Anda que lo pasaríais mal eh... Qué curioso lo de las zanahorias moradas, no las había visto en mi vida! pero más curiosa aún me parece su historia, por favorrr que no se pierdan estas cosas de la naturaleza!
ResponderEliminarHas acertado de pleno haciendo unas croquetas con este ingrediente porque el interior se ve muy original!
Besos guapa y buen finde ;)
¡Ohh, qué zanahoria! Yo diría un tanto rara, por su color, aspecto y porque no la conozco.
ResponderEliminarSupongo que en ese bocadito y si sabe como la zanahoria que conozco, estará sabroso.
Me hace ilusión probarla, a ver cuando cae una en mis manos.
Un abrazo.
Hola Yolanda, aunque la receta me gusta lo que más me atrae es la historia que nos cuentas. Lo digo porque escribes de tal forma que atraes al lector y lo enganchas con ese entusiasmo que te caracteriza hasta el final. Me alegro que pasarais tan buen rato, y como le he dicho a Carmen ya podéis ir pensando en cómo repartir unas cuantas zanahorias de estas... Un abrazo
ResponderEliminarQué receta más rica, me encanta, un aperitivo para triunfar y gustar a todos. Un abrazo, Clara.
ResponderEliminarMi querida amiga, si que pasasteis un dia hermoso, la verdad que todas vosotras formais un grupo, de esos que es un honor estar al lado, sois buenisima gente, amables y cariñosas todo un placer estar a vuestro lado, quien pudiera estar mas cerquita, que no me perderia nada que hicierais, bueno decirte que estas sorpresas tan divinas y con mi color preferido te han quedado de muerte, Un abrazo y sigue siempre siendo como eres de maravillosa
ResponderEliminarCuriosas con ese color, y el pincho...ufff, precioso y además me lo imagino exquisito...yo me conformaré con hacerlo con zanahoria normal..jeje
ResponderEliminarUn besito!
Que bonitas son estas zanahorias, las he visto en algún blog y me parecen extraordinarias, que ganas de pillarlas!!!
ResponderEliminarLas sorpresas son tentadoras y les ha dado tu toque personal, muy buena idea, aunque tal cual no podré probarlas tienen una presencia divina!!!
Una crónica estupenda, me alegra que hayan disfrutado del encuentro!!!
Besotes!!!